lunes, 26 de marzo de 2012

Never Give Up#


Estás sentado, sintiendo el calor del banquillo. Todo parece ir bien, el equipo gana, la afición grita tu nombre y tu mirada da tranquilidad al estadio. Pero en un segundo te derrumbas, esa luz se apaga y con ella tu sonrisa. No puedes sostenerte en pie, tan solo apoyas tus manos en el césped, mojándolo de lágrimas. El fútbol se acabó para ti, no hay más que hacer. Pero no es así, el fútbol necesita esa hipocresía que mantiene vivo los corazones, necesita esa mentalidad ganadora, necesita que se diga la verdad. Se necesita que tus zapatos se manchen de blanco por la línea de cal. Debes mirar hacía delante, con la cabeza alta por que como diría una grande… “Nadie es mejor que yo… pero yo soy mejor que nadie”.
Son palabras de un sabio y te lo dice un vasco y tu compañero de banquillo, te dice que por muchos que duela por mucho que te impida caminar, no debes rendirte. Por que el fútbol se juega con el corazón y no con los pies. Se juega con el alma. Nunca tengas miedo de nada, sigue adelante, camina sin miedo a tropezar. Haz que los gritos de los aficionados gritando tu nombre te llenen de felicidad, haz que un abrazo de un vasco tenga el calor de un portugués, haz que la magia de las luces y la noche de Madrid tengan una estrella en el banquillo.
Espero que esto te sirva de inspiración, por que para mí lo eres. No he visto a nadie luchar tanto como tú. Por que al balón no llega el que mas corre si no el que más quiere alcanzarlo. Y ahora es tu momento hermano, si luchas y vuelves a oler el césped recién cortado, es que has conseguido lo que querías y así nadie te parará.






Espero que vuelvas pronto, por que me falta la chispa que hace que el fútbol resucite 




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