Dentro del restaurante, con gafas de sol. Rubia, buen
cuerpo, rojo carmín intenso en los labios y uñas rojas de pasión. Deslumbraba
por su belleza, y era el centro de atención de todos los hombres.
-
Daniele, ¿Te traigo un cubo? Por que estas dejando el suelo lleno de
babas y no me quiero resbalar – Le bordeó Tony.
-
¿Eh? Perdona Tony, no te he escuchado….
-
Mejor - Dijo aliviado Tony-
¿Quién es esa chica? ¿Por qué te centras tanto en ella?
-
No sé Tony, al mirarla he sentido esa magia de la que tanto te hablo… -
Dijo Daniele sin perder de vista a la chica.
-
¿Por qué no te acercas a y hablas
con ella?
-
Creo que es precipitado, todavía siento algo por Sabrina….
-
Y luego me dices a mí si no he superado lo de Alicia…. De verdad Daniele
no hay quien te comprenda.
-
No me entiendo ni yo hermano, ni yo….
La chica abandonó el lugar, pasó por delante de los dos
amigos y dejó caer un papel al suelo. Tony, intrigado lo cogió. Era una nota,
en dónde ponía una dirección.
-
¿Qué pone en la nota Tony?- preguntó nervioso Daniele.
-
Pone…. “ Para el chico de ojos azules, te espero en
Central Park a las 21:00… FD:"Tu admiradora”
-
Bueno pues parece que soy famoso en la ciudad- Dijo con
aires de superioridad Daniele.
-
No me extraña nada… Estás mas tiempo ligando que trabajando.
-
Tss…. Pues a ver si se te pega que falte te hace.
Los dos se empezaron a reír.
Pasaron las horas y no se movieron de aquel restaurante por
decirlo de otra manera era su segunda casa en donde pasaban la mayor parte del
tiempo. Pero la ciudad es muy ajetreada y ya se hizo tarde. Los dos fueron
charlando por la calle hasta que Daniele se dio cuenta y eran las 21:00. Se
despidió de Tony y se fue directo a Central Park. En su cabeza sus pensamientos
eran dueños de sus sentimientos.
- ¿De que me conocerá esa chica? ¿Por qué ese interés
hacia mí?
Cada paso que Daniele daba, se acercaba mas a las respuestas
pero a su vez su corazón se aceleraba. De pronto llegó al parque y allí estaba
sentada, esa imponente chica y a lo lejos la Luna era espectadora de lo que iba a acontecer
aquella noche.
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